viernes, 18 de diciembre de 2009

“El delegado es un gestor de los trabajadores, ante la empresa”

jueves 19 de junio de 2008

Entrevista Sandro Ortega

Por Rubén Villanueva

“El delegado es un gestor de los trabajadores, ante la empresa”


Un pasillo largo y silencioso es el camino a esta entrevista. A mi derecha veo dos camillas vacía más adelante dos pacientes, uno dormido y otro que se queja de dolor. Llego a la guardia de emergencias del Sanatorio Mitre, donde trabaja Sandro Ortega, enfermero del turno noche. Durante la entrevista hay interrupciones, una señora avisa que falta poco para que termine el suero de su marido, una enfermera pide ayuda para colocar una vía en una vena rebelde que no se deja pinchar y un médico solicita la aplicación de un calmante para otro paciente que acaba de llegar en ambulancia.
Sandro va y viene con la rapidez de una diligencia. Abre, cierra los cajones, saca medicación y una jeringa. Se pone los guantes y sale casi corriendo. Su vocación por la enfermería es evidente por su forma de trabajar, ejerce esta profesión desde 1989. Fue delegado durante dos años y actualmente forma parte de la agrupación Enfermeros en acción, profesionales autoconvocados de sectores públicos y privados, en lucha de mejoras para el sector de la enfermería.

-¿Porque elegís ser enfermero?
-De chico me gustaba biología y anatomía. Cuando cursaba el tercer año de la secundaria y veíamos el corazón, riñón y otras partes del cuerpo humano , yo deseaba verlos en forma real no con dibujos ni laminas. Después me anoté en la Cruz Roja para hacer el curso de auxiliar de enfermería. Me recibo y me pongo a trabajar. Me fui relacionando con el ambiente hospitalario y me gustó más la enfermería. Comencé a ver una realidad que antes no había visto, como las necesidades biopsicosociales de la gente . Me gustó el mundo de la enfermería. Continué estudiando, me recibí de enfermero universitario y luego cursé la licenciatura, actualmente tengo pendiente la tesis. El enfermero es un profesional que está muy relacionado con las personas, con la comunidad, mucho más que un cura o un párroco de un barrio.

-¿Qué función cumple hoy la enfermería?
-La enfermería es una profesión científica y humanista, que tiene como rol asumir el cuidado de las personas. Es la profesión encargada de la gestión del cuidado de las personas en todo aquello que dice relación con la promoción, mantención, restauración de la salud y la prevención de enfermedades y lesiones; incluye acciones derivadas del diagnóstico y tratamiento médico.
La enfermería forma parte del equipo de salud, cumpliendo un rol relevante en el cuidado integral de la persona y la familia, ayudando al individuo en la satisfacción de sus necesidades para que pueda adaptarse a las circunstancias de la vida en forma armoniosa y saludable. La enfermería es el conjunto de actividades profesionales con un cuerpo de conocimientos científicos propios, desarrollados dentro de un marco conceptual destinados a promover la adquisición, mantenimiento o restauración de un estado de salud óptimo que permita la satisfacción de las necesidades básicas del individuo o de la sociedad.

-¿Cómo es trabajar en una guardia de emergencias?
-Cuando yo ingreso acá ya tenía experiencia empírica de trabajar con pacientes. Antes trabajaba en una clínica en el que trabajábamos dos enfermeros para veinticinco pacientes. En esta institución somos uno cada ocho pacientes. La enfermería tiene mucho de eso, cuando atendés muchos pacientes adquirís habilidad y técnica. Entonces acá era más rápido y cuando observaron eso me pasaron a la guardia de emergencias.
Cuando uno está en la guardia de emergencias, lo que siempre te afecta es la gente joven. Ahí le pones más garra o insistís más. Aunque sepas que hay casos irreversibles seguís insistiendo. Te cuesta aceptar y ver que una persona joven se muera.

-¿Cómo llegás a delegado?
-Cuando uno toma conciencia en la actividad y ve mucha injusticia, explotación, sometimiento y uno tiene más apertura y decisión, entonces asume un rol. Tiene que ver con que querés igual trato y reivindicar la imagen del enfermero. Ante todo sos una persona y por ende te deben tratar con respeto y no como “algo”. Acá en la institución hace cuatro o cinco años que comencé a militar, aunque ya hacía cosas aisladas, ayudando a compañeros con escribir descargos , asesorandolos sobre sus derechos laborales y sobre cuestiones profesionales. Creo que para algunos era un referente como persona y para otros como profesional. Con mis compañeros siempre hablamos de las cosas que nos pasan y la única manera de cambiar nuestra realidad es con compromiso y participación dentro de la empresa. Cambié mi ángulo de visión sobre nuestras necesidades y me postulé como delegado con el apoyo de mis compañeros. Creo que desde ese momento comenzó a haber una camada de enfermeros/delegados cosa que antes era muy raro ver.

-¿Te sirvió esa experiencia?
-Obvio, claro que me sirvió como experiencia personal ser delegado. Primero se aprende toda la ley de contrato de trabajo, el CCT122/75, la ley de seguridad e higiene y ART. Adquirís muchos conocimientos. Sabés como hacer los reclamos, las denuncias, las peticiones ante la empresa, recursos humanos, gerencia y empresarios.
Un delegado gestiona los conflictos analizando su origen, hace un análisis de la conflictivad, sabe priorizar y distinguir entre lo urgente y lo importante para manejarse en ambientes complejos, sin perder el objetivo. Estar concentrado en la gente y llevar adelante conductas anticipatorias para lograr mejores condiciones laborales, desde infraestructura hasta incorporación de personal. El delegado es un gestor de los trabajadores ante la empresa. Los enfermeros saben mucho más de sus obligaciones, pero saben muy poco sus derechos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario